Por Daniel Blumenthal
Aumentan las expectativas ante la visita del Papa Francisco, que comenzará en Jordania este Sabado.
Las autoridades jordanas expresaron su esperanza que la visita papal a Tierra Santa ayude a estabilizar la región y al avance del congelado proceso de paz entre israelíes y palestinos.
El Primer Ministro Abdullah Ensour dijo a un grupo de periodistas que la visita del Papa mostrará la imagen civilizada de Jordania y que el reino Hashemita es un oásis de paz y seguridad en una región turbulenta bañada en un mar de sangre, guerras y represión.
Francisco permanecerá en Amman sólo un día en el transcurso del cual cual se reunirá con el Rey Abdallah Segundo y mantendrá una misa en el Estadio Internacional de la capital jordana, donde pronunciará una Homilía y al sitio del bautismo de Jesus, en las orillas del Río Jordán. Al anochecer, se encontrará con refugiados y jóvenes discapacitados.
El Domingo volará de Ammán a Belén, llegando por primera vez a la Autonomía Palestina desde el extranjero y no desde Israel, como lo hicieron sus dos predecesores, dando a la visita en Palestina las caracteríticas de una visita de estado.
En Israel, las autoridades entregaron órdenes administrativas de limitación de movimiento a varios activistas de la extrema derecha, para que no puedan entrar a Jerusalén durante los dos días de la visita.